Las antiguas divinidades de las Islas Británicas e Irlanda continúan capturando modernas imaginaciones. Pocas, sin embargo, poseen un aura tan cautivador como la enigmática diosa galesa conocida como Rhiannon diosa galesa de los caballos. Montada sobre su corcel y envuelta en brumas mágicas, su imagen resuena con misterio y soberanía.
Rhiannon ha galopado a través de los siglos desde las leyendas precristianas de Gales, dejando su huella indeleble sobre el folclore céltico. Con sus vínculos tanto con los equinos como con el Otro Mundo, inspira un temor reverencial. ¿Pero quién es realmente esta Reina entre las diosas, que parece tan antigua como los monumentos de piedra del paisaje galés?
Orígenes y significado del nombre
En la mitología galesa, Rhiannon es una figura legendaria asociada a los caballos y la magia. Su nombre significa “gran o magnífica reina”, lo que denota su condición divina.
Aunque sus orígenes exactos se desconocen, la mayoría de académicos creen que Rhiannon desciende de la diosa céltica Rigantona, cuyo nombre comparte la misma raíz de “reina” o “soberana”. Con el tiempo, Rigantona pudo haber derivado en Rhiannon.
Aspectos y atributos
Rhiannon se presenta principalmente como una diosa asociada a los caballos. De hecho, su primera aparición en la mitología galesa es montada sobre un caballo blanco de crines doradas.
También se la asocia fuertemente con la fertilidad, la vida y la muerte. Tiene el poder de conceder la vida a los muertos, así como causar la muerte a los vivos. En algunas leyendas aparece estrechamente relacionada con el inframundo y sus gobernantes.
Leyendas e importancia
La leyenda más famosa sobre Rhiannon se centra en su matrimonio con el rey Pwyll. Tras dar a luz a un hijo, el niño desaparece misteriosamente la misma noche de su nacimiento.
Rhiannon es acusada de comérselo y obligada a cargar sobre sus espaldas a los visitantes del castillo. Solo años después el niño es encontrado vivo y devuelto a sus padres.
Legado
Este mito demuestra la asociación de Rhiannon con la vida, la muerte y el renacimiento, así como su vínculo mágico con el inframundo. También refleja antiguas tradiciones precristianas sobre diosas madres y la soberanía divina de la tierra.
La imagen de Rhiannon ha perdurado con fuerza en Gales, inspirando obras de arte, literatura y hasta canciones de rock. La misteriosa diosa ecuestre sigue cabalgando a través de los siglos en nuestra imaginación.
Paralelismos con otras diosas
Los académicos ven paralelismos entre Rhiannon y otras diosas indoeuropeas como Epona y Macha. Todas ellas tienen fuertes vínculos con los caballos y la soberanía mágica sobre la tierra.
Pervivencia de su culto
Aunque la adoración precristiana a Rhiannon desapareció hace mucho, todavía perviven algunos vestigios de su culto. Algunos neopaganos incluyen a Rhiannon entre las deidades que veneran.
Su festival coincide con el mes celta de los caballos, en el cual los antiguos britanos celebraban ritos de fertilidad ecuestre. Los lugares asociados a Rhiannon también atraen la atención de los devotos modernos de la espiritualidad celta.
La misteriosa diosa Rhiannon, montada sobre su corcel blanco, continúa su viaje a través del folclore, ejerciendo su magia equina sobre nuestros sueños y narraciones. Milenios después, su leyenda cabalga intacta a través del tiempo.
Esta diosa forma parte de las Diosas Celtas
